El presidente local del PP anuncia medidas de austeridad y asegura que gobernar en minoría no tiene por qué ser un problema
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| Valentín Bueno, Dolores Cospedal y Antonio Rojas, en un acto público en Villarrobledo |
El presidente local del PP, Antonio Rojas Gómez, ha visto cumplido el objetivo que se trazó hace menos de 20 meses: conseguir cambiar el signo político del Ayuntamiento de Villarrobledo.
Vicepresidente del partido en 2009, tomó la riendas de esta formación tras la dimisión del presidente Tomás Cabañero, en momentos difíciles para los populares. Elegido presidente con el apoyo total del Comité Local y del presidente provincial Marcial Marín, ha conseguido la unidad del partido, hacerlo volar a lo más alto, sentando en la alcaldía a Valentín Bueno, y dejar a un Partido Socialista en entredicho y maltrecho al perder tres concejales. Antonio Rojas, que empezó su militancia en Alianza Popular, lleva más de 25 años en el PP. Fue concejal con el alcalde popular Bernardo Cabañero, y desde entonces su dedicación al partido ha sido constante. En noviembre de 2009, llegó a afirmar que era posible que de nuevo el PP llegara a la alcaldía de Villarrobledo a través de un trabajo firme, decidido y constante.
El presidente de los populares asegura que el proyecto socialista está totalmente agotado, a nivel local, regional y nacional, y que así lo están poniendo de manifiesto los ciudadanos en las urnas. Estima que serán necesarios muchos años para que la maquinaria socialista recobre la confianza de los españoles y vuelva a resurgir. Desde que ocupó la presidencia, matiza que se ha logrado la unidad del partido, se han limado las fisuras que pudieran existir, y que sobre todo, se cuenta con la ilusión y el apoyo incondicional en bloque de afiliados y simpatizantes del PP.
Persona humilde
Sobre las condiciones que establecieron a la hora de fijar su candidato a la alcaldía, indica que en todo momento apostaron por una persona humilde, trabajadora, culta y sencilla, sin pasado político, y que al mismo tiempo resultara accesible a los ciudadanos. Con relación a la valoración de los resultados electorales, señala que los vecinos se han manifestado claramente por un cambio, y que esto ha propiciado que los populares fueran los más votados.
Entre las principales líneas de actuación que el PP va a desarrollar en el Consistorio, anunció auditorías de cuentas en el Ayuntamiento y en los organismos autónomos de Cultura y Deportes, que pasarán a integrarse en sus concejalías.
Añadió que una vez conocida la salud financiera del Consistorio, se llevará a cabo una política austera, ajustando gastos e ingresos. Dijo que está previsto que se trace un plan de viabilidad a cuatro años con las previsiones de pagos para todos los proveedores.
Reunión con Cospedal
La delicada situación económica de este Ayuntamiento, que se según el PP cuenta con una deuda de 40 millones de euros, requerirá según Rojas un gran esfuerzo para reflotarla, aunque considera que con las cuentas totalmente en orden y el binomio Cospedal-Valentín Bueno, así como con la ayuda de la Diputación, se abrirán otro tipo de expectativas inversoras para que el empleo y la situación de muchas empresas de Villarrobledo se normalice. Adelantó que la presidenta regional, María Dolores Cospedal ha fijado una entrevista con Valentín Bueno para abordar estas y otras cuestiones, en las que van a colaborar estrechamente, indicó.
Para los populares, gobernar en minoría no tiene por qué ser un problema, ya que según indica los vecinos de Villarrobledo han expresado su voluntad de que exista otra forma de gobernar, alejada del totalitarismo de las mayorías absolutas, y se muestra convencido de que Ciudadanos por Villarrobledo, sin pactos previos, va a colaborar en la gobernabilidad del Ayuntamiento.
Sobre si la gestión de Valentín Bueno y su equipo de gobierno podría dejar la puerta abierta a los populares en los próximos cuatro años para seguir gobernado en futuras legislaturas, Rojas señaló que ahora, con Valentín Bueno se abre un abanico de posibilidades, y que mediante una buena gestión, en la que se haga al pueblo partícipe, todos lo entenderán, y serán los propios vecinos los que sigan apoyando al PP, si cabe en mayor medida que lo han hecho en las últimas elecciones municipales.
